La Fundación Casaverde participa en el I Congreso Internacional de Terapia Ocupacional con el caso clínico “Vuelta a bailar tras daño cerebral”
La Fundación Casaverde presentó en el l Primer Congreso Internacional del Consejo General de Colegios de Terapeutas Ocupacionales la comunicación oral del caso clínico “Vuelta a bailar tras daño cerebral mediante estimulación eléctrica transcraneal por corriente directa complementaria a neurorrehabilitación: caso clínico”, cuya autoría corresponde a María Gómez, terapeuta Ocupacional del Hospital Casaverde Valladolid. En el Congreso le acompañó Marina Martínez, técnica de Calidad de Grupo Casaverde.
Este encuentro celebrado del 22 al 24 de mayo en Madrid, contó con la participación de las principales organizaciones de esta disciplina a nivel mundial. El acto inaugural corrió a cargo de Mónica García Gómez, ministra de Sanidad, acompañada de Inmaculada Íñiguez Muñoz, presidenta del Consejo General de Colegios de Terapeutas Ocupacionales. En su intervención ambas destacaron el respaldo institucional al avance de la Terapia Ocupacional.
Respecto a la presentación de la Fundación Casaverde, este caso clínico se centra en evidenciar cómo el abordaje terapéutico individualizado con la técnica de Estimulación eléctrica transcraneal por corriente directa (tDCS) puede transformar la vida de las personas con daño cerebral adquirido (DCA).
El equilibrio ocupacional a través del baile ayuda a recuperar la identidad de la persona. La estimulación transcraneal demuestra en este caso ser una técnica segura, fiable, complementaria a la rehabilitación convencional y muy útil para recuperar roles previos.
María Gómez, terapeuta ocupacional en el Hospital Casaverde Valladolid y autora de la investigación, destaca la importancia del baile como foco de la investigación. “En el caso de esta paciente, el baile es importante porque es una actividad que realizaba previamente, muy completa y que transmite muchas emociones. El equilibrio ocupacional a través del baile ayuda a recuperar la identidad de la persona”, explica.
Los resultados obtenidos reflejan cómo la innovación terapéutica y la investigación aplicada en el ámbito de la neurorrehabilitación puede mejorar la calidad de vida d la persona tras un daño cerebral. “La estimulación transcraneal demuestra en este caso ser una técnica segura, fiable, complementaria a la rehabilitación convencional y muy útil para recuperar roles previos”, destaca María.
El baile fue la actividad seleccionada no solo como una actividad placentera, sino como un agente terapéutico con alto valor rehabilitador. Su carga emocional, social, cultural y autobiográfica permitió una fuerte adherencia al tratamiento, facilitando una reconexión con sus roles previos e identidad, que se habían visto afectados por el daño cerebral. A través de esta actividad, se logró activar indirectamente áreas sensoriomotoras, prefrontales y de la corteza motora, promoviendo así una mejora integral en los planos cognitivo, emocional y funcional.
La Fundación Casaverde reafirma así su papel como un agente activo en la generación de conocimiento, investigación aplicada y mejora continua de la neurorrehabilitación. Desde los centros del Grupo Casaverde, se impulsa un modelo de intervención centrado en la persona, que integra innovación clínica, tecnología, calidad y humanización en los cuidados.
“Desde nuestros centros impulsamos un modelo de intervención centrado en la persona, que integra la innovación clínica, la tecnología más avanzada, el abordaje terapéutico individualizado y la humanización en los cuidados”, apunta Marina Martínez, técnica de Calidad del Grupo Casaverde.
